Me encanta el Tartar de salmón y la mezcla que hace con el aguacate me parece increíble. Seguramente no es la receta más baja en calorías pero desde luego que es sabrosísima y fácil de hacer, así que en un pispas te resuelve una cena.
Normalmente al Tartar de salmón le meto ingredientes como aceite de sésamo (me chifla su olor y sabor) pero cuando la quiero hacer un poco más ligera evito el aceite y lo sustituyo por una cucharadita de semillas tostadas, que le dejan ese sabor característico y le quita algo de carga calórica.
Allá va. Para hacer mi versión del Tartar de salmón para 4 personas (o dos buenísimas raciones de plato único como las que se ven en la foto) necesitas lo siguiente.
Ingredientes:
- 320 gr de aguacate
- 320 gr de salmón (son como dos rodajitas de las no muy grandes)
- Soja
- Jengibre
- 2 tomates maduros
- Cebollino
- Semillas de sésamo
- Limón o lima
- Sal
Y hacerlo es así de fácil:
Limpias el pescado (previamente lo he tenido un par de días congelado) y lo cortas en cuadraditos a tu gusto, a mí me gusta que se vean los trozos (también puedes pedir en la pescadería que te lo den ya limpio y troceado). Lo colocas en un bol pequeño y lo pones a marinar. Para esto cubres de soja (sin que sobrepase). Le añades jengibre rallado al gusto (yo le pongo dos buenas cucharadas soperas) y revuelves todo. Reposar mientras preparas el resto.
Cortas el tomate en concassé (es decir, como en trocitos de 0,5 cm). Yo lo pelo pero no le quito las semillas. Añades un poquito de sal. Reservas.
Para abrir el aguacate le haces un corte trasversal que llegue hasta el hueso y luego rotas ambas partes, enseguida verás que se separa una de ellas quedando el hueso en la otra. Vacías con una cuchara y cortas en trozos a tu gusto (como el tomate o un poquito más está bien). Lo pones en un bol, salas y espolvoreas con un chorro de limón o lima para que no se oxide.
El penúltimo paso es tostar unas semillas de sésamo en una sartén (sin aceite), solo un poquito, que no se te quemen, pero con esto harás que se potencie el olor y el sabor. Reservas.
Por último picas cebollino (como 8 hierbitas) muy pequeñito.
Ahora solo queda montar el Tartar de salmón:
Puedes ayudarte de un aro de emplatar o utilizar un bol o recipiente pequeño a ser posible con paredes rectas (esto es para que quede la misma anchura de capas, más o menos). Si usas un bol tienes que tener en cuenta que el orden ha de ser inverso porque luego le pondrás encima un plato y le darás la vuelta como si fuera una tortilla. Sea cual sea el sistema que utilices has de presionar las capas (ojo, sin aplastar los ingredientes) para que quede todo bien asentado.
En la base del Tartar irá una capa de aguacate. Presionamos para que quede todo bien cubierto. Sobre ella colocamos una segunda capa de tomate. Presionamos nuevamente. Por último colocamos una capa de salmón. En este caso, para que sea ligero yo saco trozo a trozo el pescado del líquido del marinado, escurriendo para quitar el exceso. Presionas el conjunto y quitas el aro de emplatar.
Para decorar le pones el cebollino y unas semillas de sésamo tostadas. A mí me gustar hacer este último paso sin el aro ya porque así se decora un poco también el plato.
¡Pues ya está! ¡Así de sencillo, rápido y riquísima es esta versión!
Para terminar os dejo unos tips 😉 :
- Si te da igual que tenga más calorías, en el marinado puedes incluir una buena cucharada de aceite de sésamo.
- Puedes convertir este plato en una opción más completa (y calórica) añadiéndole por ejemplo quinoa y así tendrás una versión de Poké bowl hawaiano. En este caso queda genial si le añades como aliño el marinado y sustituyes el tomate por una fruta tipo mango. Otro día os dejo esta receta.
